Autor/es: Mario Méndez / Mariano Díaz Prieto (ilustraciones)
Editorial: Pequeño editor
Colección: Incluso los grandes
Encuadernación: rústica
Páginas: 32 ilustradas a color
Idioma: español
ISBN: 978-987-1374-52-6

Tomás trabaja de noche. Por eso, llega a su casa un rato antes que sus hijas, Laura y Daniela, y su mujer, Fernanda, se levanten para empezar el día. Una de esas madrugadas de mucho frío, vuelve en bicicleta añorando la cama calentita pero al entrar al comedor se encuentra con un paisaje caótico, un mar de objetos desparramados, todo está tirado. Tomás intenta ordenar, pero a medida que avanza su ánimo cambia y se siente casi enojado. Hasta que se detiene en un dibujo de la familia, una muñeca de cabellos rojos, bloques, fibras… y con cada cosa evoca un recuerdo y eso contribuye a que disminuya el enojo inicial.

Este cuento es un pedacito en la vida de Tomás y su familia. El relato nos introduce en una situación familiar donde la rutina hubiera sido la protagonista sin la narración tierna que observa lo mínimo, que construye momentos de bienestar cotidiano.

Las ilustraciones de Mariano Díaz Prieto aportan al relato detalles que lo sacan del estereotipo o apoyan la visión del protagonista, por ejemplo con el tamaño de algunos juguetes que casi superan la altura de Tomás cuando abre la puerta y la casa parece caerse encima.

 

 

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Autor/es: Mario Méndez / Mariano Díaz Prieto (ilustraciones)
Editorial: Pequeño editor
Colección: Incluso los grandes
Encuadernación: rústica
Páginas: 32 ilustradas a color
Idioma: español
ISBN: 978-987-1374-52-6

Tomás trabaja de noche. Por eso, llega a su casa un rato antes que sus hijas, Laura y Daniela, y su mujer, Fernanda, se levanten para empezar el día. Una de esas madrugadas de mucho frío, vuelve en bicicleta añorando la cama calentita pero al entrar al comedor se encuentra con un paisaje caótico, un mar de objetos desparramados, todo está tirado. Tomás intenta ordenar, pero a medida que avanza su ánimo cambia y se siente casi enojado. Hasta que se detiene en un dibujo de la familia, una muñeca de cabellos rojos, bloques, fibras… y con cada cosa evoca un recuerdo y eso contribuye a que disminuya el enojo inicial.

Este cuento es un pedacito en la vida de Tomás y su familia. El relato nos introduce en una situación familiar donde la rutina hubiera sido la protagonista sin la narración tierna que observa lo mínimo, que construye momentos de bienestar cotidiano.

Las ilustraciones de Mariano Díaz Prieto aportan al relato detalles que lo sacan del estereotipo o apoyan la visión del protagonista, por ejemplo con el tamaño de algunos juguetes que casi superan la altura de Tomás cuando abre la puerta y la casa parece caerse encima.