Autor/es: Antoine de Saint-Exupéry / Bonifacio del Carril (traducción)
Editorial: Salamandra
Edición: 2018
Encuadernación: rústica
Páginas: 96
Idioma: español
ISBN: 9788478887194

Viví así, solo, sin nadie con quien hablar verdaderamente, hasta que tuve una avería en el desierto del Sahara, hace seis años. Algo se había roto en mi motor. Y como no tenía conmigo ni mecánico ni pasajeros, me dispuse a realizar, solo, una reparación difícil. Era, para mí, cuestión de vida o muerte. Tenía agua apenas para ocho días.

La primera noche dormí sobre la arena a mil millas de toda tierra habitada. Estaba más aislado que un náufrago sobre una balsa en medio del océano. Imaginaos, pues, mi sorpresa cuando, al romper el día, me despertó una extraña vocecita que decía:
—Por favor..., ¡dibújame un cordero!

El principito - Antoine de Saint- Exupéry - ( con acuarelas originales ) - Libro

$12.799
El principito - Antoine de Saint- Exupéry - ( con acuarelas originales ) - Libro $12.799
Entregas para el CP:

Medios de envío

  • Casa Mundus Moreno 1157 timbre "B", Monserrat, Buenos Aires, Argentina. - Lunes a Viernes de 11hs a 16hs.

    Gratis
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

Autor/es: Antoine de Saint-Exupéry / Bonifacio del Carril (traducción)
Editorial: Salamandra
Edición: 2018
Encuadernación: rústica
Páginas: 96
Idioma: español
ISBN: 9788478887194

Viví así, solo, sin nadie con quien hablar verdaderamente, hasta que tuve una avería en el desierto del Sahara, hace seis años. Algo se había roto en mi motor. Y como no tenía conmigo ni mecánico ni pasajeros, me dispuse a realizar, solo, una reparación difícil. Era, para mí, cuestión de vida o muerte. Tenía agua apenas para ocho días.

La primera noche dormí sobre la arena a mil millas de toda tierra habitada. Estaba más aislado que un náufrago sobre una balsa en medio del océano. Imaginaos, pues, mi sorpresa cuando, al romper el día, me despertó una extraña vocecita que decía:
—Por favor..., ¡dibújame un cordero!